Los metadatos son datos que registran información sobre el propio fichero: el cómo, el cuándo y el dónde fue generado.
En el caso de una fotografía revelan datos sobre la cámara, el objetivo, la iluminación, la fecha y la hora. Pero también pueden revelar datos sobre el autor e incluso la ubicación del GPS dónde se realizó la fotografía.
Son datos que pueden ser interesantes para una colección personal, o para presentar una fotografía a un concurso y demostrar su autoría. Pero no todos saben que esa información existe, y son menos aún los que recuerdan quitar esa información cuando suben fotografías a las redes sociales o a internet en general.
Son datos que pueden ser interesantes para una colección personal. Pero no todos recordamos quitar esa información cuando subimos nuestras fotografías a las redes sociales.
A modo de ejemplo, pulsando con el botón derecho y accediendo a las propiedades del archivo de imagen, podemos acceder a la pestaña de detalles. Allí veremos la cantidad de metadatos que se pueden registrar sobre una simple imagen. Y esta imagen no tiene siquiera ubicación GPS.
Esto no ocurre únicamente con fotografías sino con todo tipo de archivos, aunque los documentos ofimáticos -.doc, .xls, .ppt- y las fotografías son los más sensibles.
Esto no ocurre únicamente con fotografías, sino con todo tipo de archivos ofimáticos, siendo el Word, el Excel y el PDF de los que más registros generan sin que nos percatemos de ello.
Por norma general deberíamos asegurarnos de limpiar los metadatos de todo aquel material que queramos subir a las redes sociales o a internet.
Gracias a los metadatos he descubierto copiadas de mis alumnos, o he encontrado el lugar exacto de la excursión en que alguien desconocido se ha hecho una fotografía.
Hay quien se obsesiona con una persona en Instagram y es capaz de encontrar hasta su casa simplemente usando los metadatos. Si eres instagramer, ténlo presente.
Pero a veces, no es solo que publiquemos datos sin querer en los metadatos, a veces los publicamos a la vista de todos por puro descuido.
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